Me gusta la solidez del dibujo, el tratamiento del volumen y del color, y cómo consigue hacerte sentir que estás ahí, enfrente del peatón que se dispone a cruzar la calle. Se oye el silencio de la calle desierta de coches, algún pájaro ...Quietud y movimiento. Una constante en tus obras, a mi manera de ver/sentir

Sigo dándole vueltas a tus cuadros porque hay un hecho que no sé si lo he comentado aquí, y es el tiempo. Si un cuadro, en su propia esencia, detiene el tiempo, hay algo en los tuyos que convierte en movimiento ese tiempo inmóvil. Muchos de ellos están sumidos en una curva deformante que los dota de movimiento. Es un efecto curioso que siempre me ha gustado, y que lo apunto aquí, no quiero dejarlo pasar.El tiempo (detenido o no) siempre está presente en toda obra de arte. Lo que ya es más difícil y singularmente prodigioso es que hayas logrado crear la sensación de instante/detenido/en movimiento.

En fin, sólo quería decir eso.

El coche al fondo, ese coche al fondo, apenas entrevisto: es lo que nos recuerda lo que no deberíamos recordar, esa caída al abismo. Sin ese coche el cuadro sería otra cosa, te lo aseguro. Maravilloso ese coche atroz, rozando el mal, en una esquina.

Me gusta mucho el juego de luz y sombra (por señalar lo que más me gusta)